Con los avances tecnológicos y la carrera vertiginosa de los adelantos en la comunicación, cada medio trae su poder y dominio. Reconocemos el de la televisión con sus productos, como novelas y noticieros en donde el manejo de la información es casi siempre carente de objetividad y profundidad.
Pero pasemos más allá: Veamos los nuevos medios que han surgido y analicemoslos bajo la luz de las mediaciones sociales. Dentro del contexto actual en un mundo lleno de prisa y sin tiempo de nada, con la llegada del BlackBerry podemos decir que estamos comunicados con todo y con todos. Pero ¿Es esto verdaderamente cierto? Si tomamos el proceso comunicativo procurado por este medio, la apropiación de la información nos plantea una importante duda: ¿Ésta etapa realmente se produce?
No podemos afirmar que toda la comunicación que obtenemos con esta herramienta tenga la suficiente jerarquía ser analizada y apropiada, pero en muchas ocasiones ni siquiera tomamos parte del mensaje recibido y mucho menos vamos a dar como respuesta un mensaje claro. En el momento en que se produce la comunicación por medio de este aparato, en la mayoría de las situaciones, no tenemos forma de reconocer la información pues estamos manejando el carro ó hablando con otra persona, leyendo o concentrados en el trabajo.
Estos problemas se han vuelto una situación cultural permanente que debemos mejorar, desarrollando procesos verdaderamente comunicativos, que mejoren la recepción y la emisión del mensaje, de modo que podamos verdaderamente interactuar con el otro. Tal vez, a la velocidad en que vivimos, sea esto un poco descabellado, pero sería propicio para lograr frenar el caos comunicativo en el que estamos sumergidos.
Autor: Elsy Rodriguez
Autor: Elsy Rodriguez